La construcción del edificio coincide con la fundación del Municipio. Anterior a su aparición existía ya la advocación a Nuestra Señora del Rosario, en una capilla existente en la viceparroquia del Tablazo, cuando el poblado hacía parte del curato de Envigado. A principios del siglo XIX, los doctores Francisco de Saldarriaga y Francisco Reaza, donan media cuadra de terreno para la edificación del nuevo templo.
La labor eclesiástica de la capilla se constata desde 1825 cuando se da inicio al libro de bautizos, en 1829 aparece con el título de Santa Iglesia y en 1832 con el de parroquia.
El edificio ha seguido un proceso de transformación desde su construcción hasta nuestros días, que han afectado fundamentalmente la espacialidad interior y algunos aspectos de su forma urbana. Al respecto los historiadores Mauricio Hoyos y Angela Molina, relatan los sucesos más destacados, desde los primeros informes existentes. Para 1851 se habla de la existencia de un edificio de 50 varas de longitud y 18 de latitud, “sin enlosar, con dos pilas de madera, un bautisterio de ladrillo cubierto en losa verde, imágenes de bulto [...] altares, cuatro escaños, don confesionarios”; se habla además de un cementerio construido en tapia y teja de barro, de media cuadra, aunque no se precisa su localización... (Tomado de ficha patrimonial, Plan Especial de Protección Patrimonial 2006.)
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Nota emitida por Teleantioquia noticias el 11 de oct/2014, sobre afectación del fresco al interior de iglesia.
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